Corintios II
2 Corintios
La segunda epístola a los Corintios presenta un tema particular: el ministerio, su funcionamiento, la tarea que le incumbe y las cualidades indispensables para ser ministro de Cristo. Es necesario destacar que el ministerio tiene, en esta epístola, un carácter muy amplio. No es solamente el ministerio apostólico o ministerio de la Palabra, pues lo que aquí es traducido por ministerio en otros lugares se traduce por servicio. En efecto, todos tenemos un ministerio. Si bien no todos tenemos el de la Palabra, a cada cual el Señor le ha confiado un servicio. A menudo el más ínfimo servicio a los ojos de los hombres tiene una importancia muy grande a los ojos de Dios. Compenetrémonos bien de esta verdad: aunque no tengamos un don especial todos tenemos un servicio particular al cual debemos consagrarnos cuidadosamente. Si este último tiene más apariencia a los ojos de los hombres, ofrece también más peligros para aquel que lo ejerce.
Ser consolado y saber consolar
2 Corintios 1:1-11
Una consolación siempre es personal.
Jesucristo, garante de todas las promesas
2 Corintios 1:12-24
El apóstol Pablo no acostumbraba decir sí y pensar no.
Pablo advierte – Cortejo triunfal y olor grato
2 Corintios 2:1-17
Satanás siempre está dispuesto a hacernos caer de un extremo al otro.
Carta de Cristo
2 Corintios 3:1-18
Que no haya sobre nuestros corazones ningún velo.
Un tesoro en vasos de barro
2 Corintios 4:1-15
El corazón de Pablo era como un espejo.
Tribulación efímera – ¿Miedo al tribunal?
2 Corintios 4:16-18 – 2 Corintios 5:1-10
¡Cómo nos cuidamos para conservar y hacer prosperar “nuestro hombre exterior”!
Reconciliación
2 Corintios 5:11-21
El apóstol Pablo deseaba fervientemente la gloria celestial.
Sufrimientos del siervo – Santidad práctica
2 Corintios 6:1-18 – 2 Corintios 7:1
Aquí está lo que recomienda a todo siervo de Dios.
El amor se goza de la verdad
2 Corintios 7:2-12
El amor de Cristo apremiaba a Pablo con respecto a los corintios.
Un hermoso ejemplo
2 Corintios 7:13-16 – 2 Corintios 8:1-8
La obediencia de los corintios había motivado el gozo y el afecto de Tito.
Gestión de las ofrendas
2 Corintios 8:9-24
El “heredero de todo” se humilló haciéndose pobre.
Cómo dar – El don supremo de Dios
2 Corintios 9:1-15
Lo que Dios ponga en nuestro corazón, hagámoslo, y hagámoslo alegremente.
Las cartas de Pablo y su presencia: una misma autoridad
2 Corintios 10:1-18
El apóstol Pablo no había ido a los corintios “con vara”.
¡Cuidado, malos obreros!
2 Corintios 11:1-15
Falsos apóstoles buscaban reemplazar a Pablo en el corazón de los corintios.
Sufrimientos soportados por Cristo
2 Corintios 11:16-33
Nos muestran en qué consistía lo que el apóstol llama su “leve tribulación momentánea”.
Poder en la debilidad
2 Corintios 12:1-10
Pablo fue arrebatado realmente hasta el cielo durante un momento inolvidable.
Pablo desea tocar el corazón y la conciencia
2 Corintios 12:11-21
¡Qué contraste entre esa elevación al tercer cielo y esa vil degradación carnal!
Último estímulo y un mensaje de amor
2 Corintios 13:1-14
“Tened gozo, consolaos, sed de un mismo sentir, y vivid en paz”