Filipenses
Filipenses
En la epístola a los Efesios e incluso en la dirigida a los Colosenses, Dios nos muestra nuestro lugar en Cristo; pero, en la epístola a los Filipenses, vemos al creyente mientras atraviesa el mundo, andando en él como cristiano. En esta epístola no hay nada de doctrina; el creyente es visto en ella como quien corre hacia la meta y tal carrera es considerada como preparada por el Espíritu de Dios, pues lo que caracteriza al cristiano es que anda absolutamente según el poder del Espíritu.
Razones para regocijarse
Filipenses 1:1-18
Cristo me es suficiente.
Cristo, motivo de nuestra vida
Filipenses 1:19-30
El corazón del hombre fue creado de tal manera que no soporta permanecer vacío.
Cristo, ejemplo perfecto de humildad
Filipenses 2:1-11
El renunciamiento a sí mismo.
Ejemplos de dedicación
Filipenses 2:12-30
La ausencia del apóstol no eximía a los filipenses de la obediencia.
Las ventajas aparentes son solo basura
Filipenses 3:1-11
Un único nombre, el de Cristo glorificado.
Proseguir a la meta y seguir una misma regla
Filipenses 3:12-21
Esforcémonos para alcanzar la meta.
Gozo, paz y sanos pensamientos
Filipenses 4:1-9
“Regocijaos en el Señor”, insiste el apóstol.
Jesucristo nuestra fortaleza
Filipenses 4:10-23
Nada podía quitarle su gozo, porque nada podía quitarle a Cristo.