Manual Pastoral

¿Qué es el servicio pastoral?

Resumen

Por las explicaciones del Nuevo Testamento queda claro que con el don de «pastor» de hecho no se trata de una persona, sino más bien de un don espiritual, otorgado por Dios a uno de sus hijos, quien lo ejerce en el poder del Espíritu Santo. Su blanco es el beneficio, la edificación y el bienestar de los creyentes, para la gloria y la honra de Dios.

La Biblia no enseña la práctica tan frecuente hoy día, de que uno tome un puesto y se llame a sí mismo pastor de un grupo para ser su líder o su dirigente.

La Biblia no enseña que un ser humano deba tomar la dirección de una reunión de la iglesia, sea del culto de adoración, de la reunión de oración o de edificación (es decir, para la predicación de la Palabra de Dios).

Por el contrario, la Biblia enseña que atribuirse estas posiciones sería usurpar al Señor Jesús el derecho de dirigir a su Iglesia, en la manera que él sabe que es la mejor. Evidentemente, cometer tal acción constituye un ofensa muy grave.

La Biblia enseña que el don de pastor sí existe. El Señor Jesús, la cabeza de la Iglesia, y solamente él, es Aquel que escoge, encarga, prepara y provee lo necesario para el ejercicio de este don.

La Biblia enseña que la persona que ha recibido el don de pastor tiene que ejercer el servicio de pastorear en una abnegación total de sí mismo. No debe buscar ser servido, sino servir hasta entregar su vida por las ovejas del Señor, quien le encargó este servicio.