Oposiciones y persecuciones – Valentía de los apóstoles

Hechos 5:17-32

El sumo sacerdote y sus compañeros estaban celosos de ver que hombres sin instrucción y no pertenecientes al clero obtuvieran tanto éxito entre la muchedumbre. Además, los saduceos que negaban la resurrección estaban especialmente en contra de los apóstoles, que anunciaban la resurrección del Señor Jesús (v. 17; cap. 4:1-2). Incapaces de ejercer su autoridad de otra manera, echaron en la cárcel a los apóstoles, a quienes no pudieron silenciar. Pero el Señor envió un ángel para librar a sus siervos. Seguidamente estos volvieron a enseñar en el templo. Al saberlo, los jefes del pueblo los hicieron comparecer ante el concilio y les reprocharon querer echar sobre ellos la sangre de “ese hombre”, mientras que, ante Pilato, ellos mismos juntamente con el pueblo habían dicho: “Su sangre sea sobre nosotros, y sobre nuestros hijos” (Mateo 27:25). Cuando pretendían hacer callar a los apóstoles, Pedro y sus compañeros respondieron:

Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres (v. 29; cap. 4:19).

Una vez más dieron un brillante testimonio de la gloriosa resurrección de Jesús, “Príncipe y Salvador”, así como del perdón de los pecados por medio de él.

Forma parte del comentario bíblico "Cada Día las Escrituras"