Israel se reúne en Siquem alrededor del nuevo rey y le pide: “Alivia algo de la dura servidumbre…” ¿Qué aconsejan los ancianos a Roboam? “Si te condujeres humanamente con este pueblo, y les agradares…” (v. 7). Y en 1 Reyes 12:7: “Si tú fueres hoy siervo de este pueblo y lo sirvieres…”. Tal es, incluso para un rey, la única manera de ganar o guardar los afectos de otros. Nuestros pensamientos se dirigen hacia el Señor Jesús,
Quien no vino para ser servido, sino para servir
(Mateo 20:26-28).
Sus títulos de gloria no lo detuvieron en su camino de humillación, de amor y de abnegación. De modo que ahora tiene todo derecho a la obediencia de los hombres (Filipenses 2:6-11). Conforme a ese gran Modelo, los que tienen una posición de autoridad deben ser los primeros en el servicio. ¿Cómo exigir obediencia y abnegación cuando uno mismo no da el ejemplo? Roboam rehusó servir a su pueblo. ¿Sería extraño que a su vez las diez tribus se negasen a servirle? Su propio orgullo las apartó del camino de la humilde sumisión. ¡Y se provoca la división! Hasta el advenimiento del Señor, el pueblo nunca más volverá a encontrar su verdadera unidad.
Forma parte del comentario bíblico "Cada Día las Escrituras"