Encrucijadas

Proverbios 8:1-21

Como en el capítulo 1, la Sabiduría se vuelve hacia los perdidos y hace resonar sus llamados de gracia. Esta vez se detiene en las alturas, en los caminos y a las puertas de la ciudad, en todas partes donde pasa la gente. La encrucijada (v. 2) es un lugar de la ruta en el que se presenta la ocasión de cambiar de dirección. En la parábola, allí son enviados los siervos del rey a fin de buscar y convidar a cuantos hallen (Mateo 22:9). El capítulo 9 nos mostrará que también la Sabiduría tiene preparado un festín y que envía a sus criadas para confirmar su invitación. Quizás usted ande todavía por el camino ancho; responda ahora a la insistente voz que le llama en la encrucijada. Esa voz es la de Jesús, quien quiere su felicidad. Hace oír cosas excelentes a todos los que le escuchan, palabras rectas, claras y verdaderas (v. 6, 9). Tiene en reserva tesoros que no son comparables con el oro y la plata de este mundo. Hace heredar “riquezas duraderas” (v. 18), “bienes venideros”, “mejor y perdurable herencia”, como los llama también Hebreos 10:1 y 34. En verdad, cuán gloriosas son las cosas

Que Dios ha preparado para los que le aman
(1 Corintios 2:9; comp. v. 17-21).

Forma parte del comentario bíblico "Cada Día las Escrituras"