Oración matinal
Salmos 5
... Al final del Salmo 4 hemos visto al creyente acostarse y dormirse en paz. Aquí lo consideramos al despertar. La piedad debe marcar todos los momentos de nuestra vida, incluso de aquellos que pasamos solos en nuestra alcoba. Al amanecer, como primerísima ocupación del día, la oración del salmista subía a su Rey , a su Dios (Salmo 63:1). Imitémosle, queridos amigos creyentes, con tanto más diligencia y libertad cuanto el Dios al cual nosotros nos dirigimos es, en Jesús ...