Los fieles israelitas durante mucho tiempo serán confundidos con el conjunto del pueblo que haya seguido al Anticristo. Pero cuando llegue el momento, Dios sabrá distinguir y recompensar a sus siervos. Entonces, olvidarán sus sufrimientos y “cantarán por júbilo del corazón” (v. 14).
Y nosotros, hijos de Dios, a quienes actualmente el mundo rechaza como rechazó al Señor, seremos manifestados por Él y con Él en su gloriosa venida (1 Juan 3:1-2). ¿Sería nuestro gozo menor?
Dios creará nuevos cielos y una nueva tierra. No se trata todavía del reemplazo del universo actual por nuevos elementos según 2 Pedro 3:7-13 y Apocalipsis 21:1. Pero durante el reino de los mil años, tanto el cielo librado de la presencia de Satanás como la tierra sujeta al Señor, se hallarán en un estado nuevo. La creación conocerá la liberación (Romanos 8:22).
La vida humana será prolongada; la edad de cien años llegará a ser la de la plena juventud (v. 20)
y la muerte solo será un excepcional castigo (Proverbios 2:22; Salmo 37:9). Aun en los animales, los crueles instintos habrán desaparecido (v. 25). La naturaleza tendrá entonces su pleno desarrollo y responderá a los designios iniciales de Dios en cuanto a su espléndida creación.
Forma parte del comentario bíblico "Cada Día las Escrituras"