La cena del Señor
Al celebrar la cena del Señor damos al menos cuatro miradas importantes:
Los dos cantores
Tal vez ningún cantor, antes ni después, ha tenido una voz tan hermosa como la del gran italiano Caruso. Entretenía y encantaba a las multitudes en el mundo entero y cuando llegó al fin de su carrera uno de los grandes periódicos anunció su muerte de la siguiente manera: «Caruso nunca cantará más».
¡Hoy, Señor, hoy!
Viajaba en la Suiza. Pero no contento con las atracciones turísticas más comunes, se fue solo en busca de paisajes encantadores y curiosidad interesantes más allá de las rutas normales. Y no se desilusionó.