Cinco palabras
1 Corintios 14:19
A menudo nos maravillamos de cómo y con qué poder las palabras de la Escritura obran en el corazón: verdaderamente asaetean «como aguijones». A veces una corta frase, o quizás unas cuantas palabras, se adueñan del corazón, penetran profundamente en la conciencia y ocupan de tal modo nuestra mente que es notorio que solo Dios puede ser el autor del Libro que contiene dichas palabras.